Breathe

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jueves, 5 de junio de 2014

Capitulo 27






"Solo quiero hacerte feliz."


Justin's point of view

- ¿Por cuanto tiempo se ha ido? - ella se encogió de hombros. La abracé y ella correspondió mi abrazo. 

- Pensé que estabas molesto conmigo - murmuró

- Estoy molesto contigo - suspiré.

- No quiero eso - se separó de mi y me miró. No podía estar molesto con ella.

- Vamos a mi departamento - tiré de su mano hacia la ventana.

- Espera Justin, no puedo bajar por la ventana - soltó una risita.

- Te veré abajo - cogí sus mejillas y la besé. - Dile a tu madre que vienes conmigo, coge algo de ropa.

- Esta bien - sonreí y me apresuré a bajar.

Esperé en mi coche a ______ . Ella salió con una maleta colgada de su espalda.
Me sonrió mientras caminaba hacia mi coche. La vi resbalar hacia atrás y caer. Solté una carcajada y salí del coche. Lo rodeé y la vi en el suelo intentando levantarse.

- ¿Estás bien? - la ayudé a levantarse.

- Si - ella se levantó y frotó su trasero.

- Vamos - le quité la maleta y la acompañé a la puerta del copiloto. Abrí la puerta y ella entró. Cerré la puerta y dejé la maleta en el asiento trasero.

Puse mi mano en su pierna mientras conducía camino a casa.

Esperaba que Mindy se hubiera ido, no quería que _______ se sintiera incómoda.

Bajé del coche y cogí su maleta colgandomela en la espalda. Agarré su mano mientras caminabamos para entrar en el edificio.

- Justin, ¿Ya no vas a trabajar al taller? - me preguntó.

- Si, es solo que cogí unos días para entrenar para el combate de pasado mañana.

- ¿Por eso no venias a verme?

- Si, lo siento. Practicamente estoy rompiendo las reglas de Sam.

- ¿Sam? - preguntó extrañada mientras subía frente a mi las escaleras.

- Mi entrenador.

- ¿Es necesario que boxees? - llegamos a la puerta y saqué las llaves de mi bolsillo.

- Si

- ¿Por qué?

- Ya lo sabes nena, debo dinero - ella suspiró.

La dejé entrar y cerré la puerta. Steph y Mindy estaban sentados en el sofá viendo la televisión.
- Hola - saludé. Tiré de la mano de Williams para evitar que Mindy la envenenara con la mirada.
Cuando entramos en mi habitación cerré la puerta y dejé la maleta encima de la cama. ______ se sentó en el borde de mi cama.

Saqué mi móvil del bolsillo y le envié un mensaje a Steph.

"Necesito que nos dejeis solos"

" ¿Quieres mojar? "

"Solo largate" .

Tiré mi móvil a la cama - Tengo algo para ti - dije abriendo el cajón de la mesita de noche.
- ¿El que? - preguntó curiosa.

Saqué una bolsita plateada y cerré el cajón. - Toma - ella se levantó y frunció su ceño levemente.

Cogió la bolsita y la abrió. Puso la bolsa boca abajo y en su mano cayó el colgante que yo le había quitado.

Ella miró el colgante - No he podido dartelo hasta ahora porque cuando te lo quité rompí el cierre, así que lo llevé a una joyería para que lo arreglaran. - me miró y apretó el colgante en su mano.

- Gracias por devolvermelo, era importante para mi.

- Lo siento. - ella asintió y miró de nuevo el colgante.  - Déjame ponertelo. - asintió  y dejó la bolsa encima de la cama. Me dió el colgante y se giró levantando su pelo.

Le puse el colgante y se lo abroché con un poco de dificultad. - Gracias - ella dejó caer su pelo.
- ________ - cogí su mentón y la obligué a que me mirara. - Me arrepiento de lo que hice. No hay ningún solo día en el que no piense la jodida suerte que tengo porque me hayas perdonado. Se que no me lo merezco.

- Estoy bien - susurró.

- Se que no lo estás. Solo quiero hacerte feliz. Es en todo lo que pienso desde que te vi en el parque y aceptaste tomar un café conmigo.

Ella sonrió débilmente. - Gracias.

- No tienes que dármelas, no me las merezco.

- Deja de decir eso - ella se colgó de mi cuello y la sujeté de la cintura. -  Siempre sabes lo que tienes que decir en el momento indicado - dio con su dedo índice en mi nariz. - Eres tan tierno.
Bufé - No se lo digas a nadie - ella rió y sonreí al verla reir.

- Esta bien, será nuestro secreto. - sonreí y ella unió sus labios con los mios.

Puse mi mano en su nuca y su lengua pidió paso a mi boca. La dejé entrar y profundizó el beso. Ella se puso de puntillas y me empujó. Perdí el equilibrio cuando la parte de atrás de mis rodillas chocó con el borde de la cama.

La cogí de sus piernas para que ella cayera conmigo. Pasé mis manos por sus piernas y ella metió sus manos por mi camiseta.

Tiró del borde de mi camiseta y me incorporé para que ella la sacara. La tiró a un lado y volvió a besarme mientras que sus manos seguian recorriendo mi abdomen.

Sus besos bajaron a mi pecho y aparté su pelo. Ella se incorporó y se quitó la camiseta. Me quedé mirandola y ella volvió a mis labios. - No, espera, para - me deshice de su beso y la empujé hacia el lado.

- Nena - me levanté y pasé una mano por mi pelo. - Tu primera vez tiene que ser más especial, una habitación llena de petalos, velas...

Ella se quedó sentada en la cama mirandome dolida y excitada.

- O vuelves aquí y me quitas la ropa o salgo por esa puerta y no vuelves a verme nunca más. - ella se cruzó de brazos.

Antes de poder controlarlo un gruñido de desasperación salió de mi garganta y me pasé la mano por mi rostro frustrado y me metí en el cuarto de baño sin saber que hacer.

Después de un momento la escuché acercarse a la puerta. 
- ¿Estas seguro de que vas a hacer esto? - la escuché decir. No contesté. Joder, claro que quería hacer esto, pero ella merecía que su primera vez fuera diferente. Maldita sea.

Salí del cuarto de baño y la escuché por el salón. Me apresuré y antes de que ella pudiera salir la agarré del brazo y la besé con desesperación.

Ella tiró su maleta al suelo y la cogí de su trasero impulsandola hacia arriba.

Rodeó mi cintura con sus piernas y me choqué con una silla. Ella rió y puse su espalda en la pared.

- ¿No vas a dejarme ir? - sus dedos jugaron con mi pelo.

- No, estoy deseando esto, yo solo quería  ser más romantico. - entré en la habitación y cerré la puerta con el pie.

La tiré a la cama y ella se quitó su camiseta. Me puse sobre ella y puso sus manos en mis mejillas para besarme mientras la echaba hacia atrás.

Bajé mis besos hacia su mandíbula para después besar su cuello y hacer que ella temblara debajo de mi. Sonreí en su cuello y di pequeños besos hasta llegar a su pecho.

______ se incorporó y se desabrochó el sujetador tirandolo a un lado. Miré sus pechos y ella se tumbó de nuevo.

Toqué sus pechos y la vi morder su labio mientras que sus mejillas se teñían de rojo.
- ¿Te da vergüenza? - dirigí mi boca a uno de sus pechos y ella puso su mano en mi pelo.

- No - mintió.

- Nena, puedo ver tus mejillas rojas - me dirigí al otro pecho mientras mi mano se ocupaba del otro.

- Es por la calor del momento - sonreí y bajé mis besos por su abdomen hasta llegar al borde de sus pantalones. Los desabroché y bajé la cremallera.

Ella levantó su cadera para que pudiera bajarlos. Le quité sus zapatos y calcetines y después tiré sus pantalones al suelo. Dejandola en unas bragas negras translúcidas.

- Me haces sentir un trozo de carne - dejé de morderme el labio y miré a sus ojos.

- Solo quiero hacerte sentir deseada - cogí su pié y lo levanté, besando su tobillo.

- Lo estás haciendo - me puse entre sus piernas y besé la parte interior de su muslo.

Ella rió y levanté mi mirada - Me haces cosquillas - se encogió de hombros. Me levanté y me quité los zapatos y los calcetines para después deshacerme de mis pantalones.

Del cajón de mi mesita de noche saqué un preservativo y lo dejé en la cama. Volví a ponerme entre sus piernas y la toqué por encima de su ropa interior.

Ella levantó sus caderas y no tardé en quitarselas. - No sabes cuanto tiempo he imaginado tenerte en mi cama.

- ¿Por qué has esperado tanto? - me levanté de la cama y me quité los boxers.

- Nunca era el momento indicado.- volví a ponerme entre sus piernas y toqué su feminidad con mis dedos haciendo que ella mordiera su labio.

Me dirigí a sus labios y la besé. Con mi otra mano la tocaba hasta que metí un dedo dentro de ella. ______ pasó sus manos por mis brazos y metí otro dedo lentamente.

Mordí su labio y ella abrió sus ojos. Saqué mis dedos y cogí el preservativo. Lo abrí y después de tirar el plástico al suelo me lo puse bajo la atenta mirada de Williams.

- ¿Nerviosa? - le sonreí.

- No - alcé una ceja - En verdad si - mordió todo su labio inferior.

- Iré lento - me coloqué en su entrada - Cuando quieras que pare dimelo.

- Vale - ella puso sus manos en mis brazos y entré.

Introduje mi miembro en ella lentamente. Mordiendo mi labio para no perder el control y hacerle daño.

- ¿Estás bien? - ella lucía un poco incómoda.

- Si, bueno, no, me duele un poco. 

- ¿Quieres que pare? - ella negó con su cabeza. Salí y volví a entrar en ella. - Eres tan estrecha - lamí mis labios y ella tocó mis brazos sintiendo mis músculos tensos.

- ¿Eso es bueno o malo?

- Es demasiado bueno. - Volví a salir y a entrar en ella.

- Justin para, no puedo - ella puso sus pequeñas manos en mi pecho.  - Me duele. - suspiré.

- Esta bien - salí de ella.

- Lo siento - cerró sus ojos.

- No tienes que disculparte, es normal - la besé y pasé mi mano por su pelo. - Voy al baño, ahora vengo - besé su frente.

Cuando llegué ella se había puesto algo comodo que había sacado de su maleta y estaba mirando su móvil. Me puse unos boxers y saqué del armario unas calzonas.

- No se como no tienes frío - dijo cruzando las piernas como un indio en el medio de la cama.

- Tengo mi estufa personal - ella sonrió - O vuelves aquí y me quitas la ropa, o salgo por esa puerta y no vuelves a verme nunca más - la imité y reí.

Ella rió avergonzada y me tiró un cojín. - Olvida eso, ¡Que vergüenza! - le tiré el cojín que ella me había tirado y se tapó la cara con este.

- Nena - me tiré en la cama de lado - Jamás me hubiera imaginado que pudieras decirme eso.
Ella se encogió de hombros y jugó con el dobladillo de su camiseta.
Mi móvil sonó y _____ me lo dio. El nombre de Rachel apareció en la pantalla.
- ¿Si?

- ¿Justin? - escuché un sollozo de Rachel.

- ¿Rachel? - me levanté de la cama preocupado. - ¿Que te ha pasado? ¿Donde estás?

- Estoy cerca de la plaza Nathan Phillips, en el primer callejón. Necesito que vengas.

- Voy para allá - colgué.

- ¿Que ha pasado? - preguntó ______.

- No lo se - me puse una camiseta. - Ahora vengo - me puse mis zapatos y salí practicamente de la habitación sin escuchar alguna afirmación de Williams.



Conducí lo más rápido que pude hacia la plaza. Aparqué en un aparcamiento para minusválidos, ya que era lo único que vi libre y bajé del coche. Lo cerré y busqué a Rachel.

- ¿Justin? - me giré y vi su rostro magullado. Ella tenía un corte en su mejilla izquierda. Su ceja estaba rota, su labio hinchado y salía un poco de sangre de su nariz.

Sus ojos estaban rojos y ella apenas podía mantenerse en pie. Me acerqué a ella y la abracé, haciendo que empezara a llorar en mi pecho.

- Shhh, estoy aqui - acaricié su pelo y la cogí en peso para llevarla al coche.
La dejé en el asiento del copiloto, le puse el cinturón mientras ella soltaba pequeños sollozos.
No hablé durante todo el camino, esperando que ella se relajara.

La llevé en peso a casa mientras ella escondía su rostro en mi pecho.

Entré en casa y la dejé directamente en el cuarto de baño. La senté en el inodoro y me puse de cuclillas. - ¿Que ha pasado Rachel?

- Salí a correr, y al pasar por uno de esos callejones tiraron de mi y me golpearon. Ellos me dijeron que te dijeran que era una advertencia. - sorbió su nariz.

-¿Pudistes verles la cara? - ella negó con su cabeza.

- Duchate y te curaré - ella asintió. Besé su frente y salí del baño cerrando la puerta.
Fui a mi habitación esperandome ver a ______ en mi cama, pero no la ví. Había una nota encima de la cama.

" He mirado en el frigorífico y no hay nada de comer, iré a comprar algo. No llevo mi móvil porque se ha quedado sin batería y olvidé mi cargador. xx "

Pasé una mano por mi pelo y dejé el papel en la mesita de noche.
Esperé impacientemente a que Rachel se duchara. Le había enviado un mensaje a Steph y a Michael con lo que había pasado.

- ¿Justin? - escuché su voz. - No tengo nada que ponerme.

- Voy - entré en mi habitación y saqué unos boxers y una camiseta blanca. Ella sacó el brazo por la puerta y se lo di.

Esperé allí a que ella se vistiera y abrió la puerta. - Sientate, curaré tus heridas.

Ella obedeció y saqué el botiquín. Empecé con su corte en la mejilla, y regañandole para que no se moviera, y seguí por su ceja y nariz.

- Pondré un hielo ahora en tu labio - lo toqué sutilmente. - ¿Tienes alguna herida más? - ella me miró y mordió su labio. - ¿Rachel? - ella suspiró con pesadez y se levantó. Me eché hacia atrás y ella levantó su camiseta dejando solo sus pechos tapados.

Me agaché y vi los moratones que ella tenía en la parte de las costillas - Lo siento - los rocé con mis dedos. - Lo siento tanto.  - Ella puso su mano en mi pelo y miré hacia mi izquierda para ver a ______ allí, mirando con una expresión neutra la escena.

- ¿He interrumpido? Lo siento - se giró sobre sus talones y me levanté.

- _______, ¿Donde vas? - la vi entrar en mi habitación y coger su maleta.

- A casa.

- ¿Que? No, espera, no te vayas - ella no dejó que la tocara. - Es Rachel maldita sea.

- Como si es la Reina de Inglaterra. Voy a comprar algo de comer y te veo en el baño tocandola. - salió de casa.

- ________, no me hagas esto, no puedo ir detrás de ti, no puedo dejarla sola en casa - ella se encogió de hombros.

- Quedate con ella - y la vi bajar las escaleras.

- ¡Te estas enfadando por una tontería Williams! - le grité.

- ¿Justin? - vi a Rachel parada en la puerta. - Yo... Lo siento.

- No, no tienes por qué disculparte, no has hecho nada.


Twitter: @desirealba #Breathe

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